viernes, 9 de agosto de 2013

Siempre nos quedará Duratón

Después de un par de años de ausencia, he vuelto a las Hoces del río Duratón en la provincia de Segovia, cerca de la espectacular villa de Sepúlveda, y uno de los santuarios de buitres más importantes de la península Ibérica.
El día y la hora de llegada no eran los más adecuados, pero menos da una piedra... y duele más. Un cielo aborregado y con un viento un tanto fuerte, hacían difícil mantener fijos los parámetros de la cámara y, además, los buitres pasaban como balas por delante del objetivo. Y, a pesar de todo, algunas fotos se pudieron salvar de la quema.

Resulta verdaderamente impresionante ver pasar tan cerca a estos colosos del aire y, aveces, la tentación consiste en quedarse pasmado ante un vuelo majestuoso, planeando sin esfuerzo aparente, tan sólo dejándose llevar...

 La idea inicial consistía en fotografiar a los buitres sobrevolando las aguas del pantano, para conseguir ese fondo difuminado y el contraste entre el color del agua y el dorso de los colosos. Y lo cierto es que no se portaron mal, dadas las condiciones.

 Quizá lo mas impresionante de los vuelos que hacían los buitres pasando a mi altura sea la mirada de estos titanes. Realmente, impresiona.

Aunque, para mi gusto, lo mejor sea verlos planear sobre el agua desde una posición elevada, es como si volaras junto a ellos...

La mayor parte del tiempo lo pasaron sobrevolando la zona que se encuentra a la iizquierda de la ermita de  San Frutos (preciosa la imagen de la Virgen), de modo que la luz pillaba siempre de frente.

Ermita de San Frutos desde la posición que elegí para pasar el día-

De todas las fotos que pude hacerles al paso, ésta es, quizá, la que más me gusta, por su mirada, por el juego de tonos y, pese al recorte del ala.

Al terminar la sesión me volvía a Sepúlveda, para recoger a unos amigos que habían recorrido el cañón por la senda que discurre a lo largo del río (Manolo y Norberto delante del panel que explica el recorrido).

 De allí nos fuimos a la Plaza de España para tomar unos helados, no sin antes posar en para la posteridad junto a los lugareños y el amable funcionario que se ve en debajo del cuadro torero (en la foto, Antonio, Norberto y Manolo).

Lo dicho, aunque a veces en nuestras sesiones pajareras pasemos la mano por la pared: "Siempre nos quedará Duratón"

1 comentario:

Pirri dijo...

Buenisimas!!! Yo estoy por la zona (cercedilla) Mucho pájaro pero poca foto, no todo en la vida es afotar